El giro afectivo

Propuesta filosófica que busca romper el dualismo entre lo interno y lo externo, lo privado y lo público, y por tanto lo afectivo, pasional y emocional con la esfera de lo político. Gracias a esta ruptura se puede observar que el ejercicio de la política moderna y contemporánea se abstraen de los lineamientos de la razón para invocar motivos sensibles para gestionar adhesiones; tal es el caso de Colombia en donde se hace alusión a hechos como mutilaciones con minas antipersonas, niños en la guerra, feminicidios, desplazados, entre otros, con el fin de obtener adeptos a favor del plebiscito por la paz.

Rictus mudo: la respuesta inteligente

El lenguaje del rostro hace parte de la ciencia semiótica, y sus códigos se expresan en unidades mínimas pero significativas que se denominan kinemas. Ahora bien, el rictus mudo equivale a una leve contracción de los labios que deja al descubierto una parte de los incisivos centrales superiores, insinuando una leve sonrisa, al tiempo que la mirada parece detenerse en el pensamiento. Es el instante en el cual el cerebro inmoviliza el área de broca en donde se genera el habla, y reactiva otras neuronas con el fin de escudriñar la mente y el corazón y de su interlocutor.

Nomofobia

La palabra nomofobia corresponde al acrónimo: no-mobile-phone-phobia que significa terror a quedarse desconectado del teléfono móvil. Dicho trastorno de ansiedad está asociado al pavor a salir de casa sin el celular, a dejarlo con la carga agotada, a extraviarlo o tenerlo que abandonar en las escabrosas manos de un ladrón. Posibles síntomas de un nomofóbico de cualquier edad, religión, etnia, profesión o si es partidario del sí o del no: ansiedad extrema, malestar general, nerviosismo, inquietud, pérdida de la autoestima y del apetito gástrico y sexual, instintos de muerte y soledad absoluta.

Espolear o espoliar

“Me espoliaron la serie televisiva”. Este enunciado equivale a decir que me contaron el nudo y el final, en otras palabras, me la estropearon y por tanto me hicieron perder el interés. También contiene el sentido de expropiar de expropiar a alguien injustamente de algún elemento de valor económico, de esta manera se podrá escuchar a muchos hispanohablantes decir, “me expoliaron el celular” y a otros más cultos, “me espolearon la billetera”.