cachaco / rolo /corroncho

En Colombia los habitantes de las costa caribeña usan el adjetivo cachaco para referirse a los habitantes del interior del país, antioqueños, santandereanos y capitalinos (bogotanos) por su forma de vestir, un poco clásica, a diferencia de los costeños quienes, por lo general, prefieren chanclas, pantaloneta y camiseta.

El término rolo se le aplicaba a los mestizos nacidos en la sabana de Bogotá, dadas algunas variaciones de su lenguaje, así por ejemplo la pronunciación del fonema /r/ en posición inicial de palabra, un poco asibilado o arratrado, además del uso de términos, tales como  ¡Ala!, ¡caray!, ¡quihubo!, su mercé, chino.

Durante varias generaciones, algunas personas han dicho que el ‘rolo’ es el bogotano hijo de padres que no son de la capital, y que el cachaco sí es el bogotano original.

A finales del siglo diecinueve el término corroncho surgió en la costa Caribe colombiana para referirse despectivamente a personas ordinarias, que no tienen buena educación ni buenos modales, independientemente de su condición social, creencias religiosas o lugar de origen.

La palabra, según los testimonios de aquellos tiempos, provino inicialmente de la corteza de los árboles agrietada por el calor, la cual denominaban “corroncha”, en las soleadas sabanas de lo que son hoy los departamentos de Bolívar, Córdoba y Sucre de Colombia.

Luego le dieron ese mismo nombre a los árboles fuertes y resistentes que no tenía fruto, y después lo heredó un pez de rio de la misma región, cuya carne blanca es de sabor exquisito y se prepara asado a la parrilla y en hojas de plátano.