In extremas res, In media res, In initium res

Estos tres latinazos hacen referencia a tres mecanismos de comunicación en la realización un texto oral o escrito, bien que el narrador inicie el relato o texto por el final de los acontecimientos (In extremas res), por la parte central de los hechos (In media res) o, lo que es lo más común, por el comienzo (In initium res).

Estos tres mecanismos le permiten al narrador establecer destacar determinados aspectos de los hechos, sin importar si sean reales o estén en el campo de la fantasía.

“Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”

En este microrrelato del autor guatemalteco Augusto Monterroso el autor prácticamente destaca el final de los hechos para crear un clímax de preocupación o de terror al significar que  después de que la sociedad despertó, el dinosaurio que representa la corrupción que nos impacta severamente con pobreza, violencia, impunidad y desnutrición, entre otras monstruosidades, sigue entre nosotros.

Un ejemplo de In media res puede ser el Fragmento de José Zorrilla (Acto III 1844)

Don Juan. ­- ¿Conque por mí doblan?

Estatua. – Sí

Don Juan. – ¿Y esos cantos funerales?

Estatua. – Los salmos penitenciales que están cantando por ti.

Don Juan. – ¿Y aquél entierro que pasa?

Estatua. – Es el tuyo

Don Juan. – ¡Muerto yo!

Estatua. – El capitán te mató a la puerta de tu casa.